En la primera visita el sastre asesorará sobre el guardarropa perfecto según estilo de vida y necesidades tanto laborales como de ocio de cada cliente.

Para las prendas decididas, se le mostrarán las telas y se le aconsejará sobre la que funcionará mejor para la prenda y estilo seleccionado. Disponemos de mas de 9.000 referencias de tejidos sobre muestrario además de las del propio almacén de la sastrería.

Además se seleccionará el diseño de la prenda y los detalles de la misma. A continuación se tomarán las medidas necesarias (17 para la americana + 7 para el pantalón) así como datos de la fisionomía del cuerpo del cliente (altura de hombros, lado mas alto, forma de espalda y de pecho, trasero…..etc).

El sastre preparará la tela y marcará directamente sobre ella la prenda a realizar. Pasará ese dibujo al patrón de friselina que dejará en bruto sin recortar hasta que realice la primera prueba.

Se abrirá ficha del cliente con todos los datos y medidas y en ella se guardarán todos sus patrones.

Se cortan las prendas a mano dejando tela extra en ciertas costuras (ensanchas) que permitirán cambios si hay alteraciones en el peso del cliente.

En este paso se cortan las entretelas de delantero y cuello, el pie de cuello de fieltro y la crinolina para el pecho, en el caso de americana.

Para pantalón se cortan el forro de bolsillos, la entretela de bajos y de pretina de cintura, cremallera, botones de cierre y tirantes, hebillas, forro… etc.

Con todo ello se hace un pequeño paquete que se identifica con la papeleta con el nombre del cliente, las medidas y especificaciones y pasa al taller donde el oficial de sastrería montará la primera prueba.

El sastre prueba al cliente por primera vez. La prenda va sin entretelas, solamente delantero y espalda hilvanado y sin cortar pinzas interiores.

Se desmonta entero y se afina con las medidas tomadas directamente sobre el cliente, se vuelve a cortar la tela y se ajusta también el patrón que servirá para futuros encargos.

El sastre ajusta el traje al cuerpo del cliente.

La prenda ya afinada vuelve al taller donde el oficial que la preparó continúa cosiendo pinzas, costadillos y centro de espalda. Monta las entretelas en los delanteros y las trabaja con la plancha para dar la forma del pecho. Se hilvana el cuello, los hombros, los costados y se monta una manga.

Se ajusta al cliente desmontándola de nuevo, salvo pinzas interiores y se procede al afinado final (anchos, largos…etc)

Se le añaden forros, percalinas de bolsillos, botones, hombreras si es necesario… y vuelve a taller para su acabado.

Con las medidas adicionales se termina, con ojales, forros, etiquetas, y se deja totalmente acabada y planchada.

El sastre prueba el traje completo con pantalones y se corrigen los últimos detalles en el caso de ser necesario.

Se pone el nombre del cliente y la fecha a la etiqueta interior que pasará al archivo numerado de Sastrería Córdova.

La prenda se entrega con las recomendaciones de cuidado y conservación y con las sugerencias de los complementos que pueden conjuntar bien para su utilización.

En las siguientes, si el cliente no ha cambiado su configuración, puede eliminarse alguna prueba y acelerar el proceso.

Normalmente, y siempre que el cliente esté disponible para realizar las pruebas, el plazo de ejecución de un traje es de mes y medio.

La realización de un traje lleva un mínimo 60 horas de trabajo manual.